sábado, 2 de abril de 2011

6 meses de blog


      El día 2 de octubre del pasado año iniciaba este blog su andadura. Se cumplen hoy, pues, seis meses de aquel pequeño y doméstico hito. Realmente, el trayecto realizado, con la complicidad y soberbia respuesta de tantos y tan fieles amigos, resulta para mí impresionante, sorprendente y emocionante (o, aún mejor, inviertan el orden de este trío de adverbios). Sí, porque aquello que nació como un ensayo de divertimento, sin dejar de serlo -divertido; y mucho, y cada vez más- ha derivado en este tiempo, por mor de la fidelidad y el interés que día a día me demuestran tantos lectores, en renovada obligación “cuasi” laboral para mí. Y me alegro infinito por ello, créanme. Yo, que me las “hacía” permanentemente ociosas, mis horas, tras la pre-jubilación, me las veo ahora de nuevo con recuperadas prisas, y deliciosa angustia, cada día, buscando y rebuscando, leyendo y releyendo, desde las siete de la mañana, para encontrar temas y asuntos nuevos de interés que publicar. Esto del blog, primera verdad aprendida, se lo “come” todo, y en frenética cadencia, si quieres que parezca vivo y actual.
      En fin, que, como bien se ve, estoy encantado; e ignoro ya a dónde puede llevar este reto. Si hace seis meses alguien me hubiera pronosticado que a día de hoy contabilizaría más de 9.000 visitas, ni loco le hubiera creído. Si me cuentan que aquellas poco más de 500 “entradas” -increíbles ya- del primer mes, habrían de pasar a más de 2.000, que el contador registró en marzo, diría lo que aquella joven colega mía solía expresar con tanta gracia: ¿tú te “pinchas”, o qué?... Ciertamente, no, no me “pincho”; pero no he de ocultarles que, con bendita frecuencia, sí me “pellizco”, muchas veces, cuando abro la solapa de “administrador” que nos procura “blogger” (qué magníficamente funciona, por cierto), y le echo un vistazo al mapamundi que nos facilitan para saber desde dónde nos pinchan (en este caso, léase en la acepción de “nos clicquean” -¿se escribe así?-). A mí, qué quieren qué les diga, me parece una visión fantástica. Y cada vez más. ¡Muchísimas …muchísimas …muchísimas gracias a todos!



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